Paula Gaila es una emprendedora experta en marketing digital y en “music curation”. Es la directora de la empresa Wow My Music, especializada en crear el branding musical de hoteles y espacios con alma:

“Para mí la música siempre ha sido mi compañera, la cómplice, la salvadora, casi casi diría mi única certeza. Estos días en casa, a todos se nos hacen difíciles y largos, es fácil dar paso a la ansiedad porque es una situación nueva ante la que no sabemos muy bien cómo reaccionar y tenemos que tirar de recursos que ocupen nuestra mente o que nos ayuden a hacer este encierro más llevadero.

Si hay algo que estoy segura que no paramos de hacer todos en nuestras casas, es escuchar música. Está comprobado científicamente que oír canciones nos hace más felices y que la música influye en nuestro comportamiento y nos ayuda a sosegarnos y a rebajar los niveles de estrés.

Y además estoy segura de que no sólo escuchamos canciones de ahora, si no canciones que nos gustan de siempre, que nos transportan a momentos del pasado, que nos evocan recuerdos y que nos llevan a lugares o a personas. Esa sensación nos reconforta, es como estar en casa, a salvo, volver a un lugar seguro que nos lleva a un tiempo que conocíamos, normalmente feliz y que tanto echamos de menos ahora.

El día que declararon el estado de alarma decidí hacer una playlist con música para acompañar a la gente en estos momentos, es una selección  con canciones para escuchar en casa, intento actualizarla a diario y ¡ya la siguen más de 700 personas!.

En la lista encontraréis canciones de todo tipo, pero hay una de Elton John, (no es que sea yo muy fan de este señor) que me recuerda a un momento feliz, a una mañana de verano en el apartamento donde veraneábamos en la costa de Málaga, un día cualquiera del mes de julio, yo tendría unos 8 años y mi padre abría las cortinas y nos despertaba con la radio, esa mañana sonó “Sacrifice”, y al abrir los ojos sentí una sensación de felicidad absoluta.

Ese recuerdo del verano siempre me acompañará y estos días vuelvo a él a menudo, deseando que llegue el verano y nos haga salir a la calle de nuevo a compartir la vida, nuestra vida que parece haberse parado de golpe”.