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Algunos secretos de El Tomás de Sarrià

 

“Barcelona is yours take it!” dice el mapa que entregamos en recepción del Hotel Yurbban Trafalgar. Y es que para nosotros vivir como un nativo y experimentar la verdadera Barcelona es uno de nuestros objetivos. Por ello, en nuestro blog nos gusta destacar lugares que nosotros recomendamos en ese mapa, sencillamente porque nos gustan y creemos que refleja nuestra filosofía Live as a Native. No hay nada mejor que vivir las ciudades como un nativo y perdernos en los lugares más especiales.

 

Hoy empezamos en el número 49 de la calle Mayor de Sarrià. Allí se encuentra el Bar Tomás, donde algunos dicen que sus bravas son una experiencia casi mística, a las que incluso se les ha dedicado un libro, blogs y menciones de famosos.

El Bar Tomás nació en 1929 en el barrió de Sarrià. Es un barrio que vale la pena visitar, todavía conserva el encanto de “pueblecito”, sin duda tiene una magia especial. Además el Tomás se encuentra en su calle principal.

Lo primero que percibes en su entrada además del ruido de platos, las voces de sus camareros y el alto volumen de la clientela; son precisamente unas fotografías de cómo era este bar y Sarrià, a principios de siglo. Párate unos minutos a disfrutar de esas imágenes en blanco y negro que valen la pena.

Aunque hace algunos años que lo modernizaron, este bar familiar conserva el mismo encanto “de toda la vida”. Una barra larga, con los mismos camareros de siempre. Como Perico, por ejemplo, que lleva toda la vida. Una hilera infinita de servilletas de papel en el suelo nos indican la cantidad de gente a la que han servido durante el día.

Pregunto a una chica extranjera que se llama Sharon por qué está ahí: “Estoy estudiando en Barcelona y mis compañeros de clase me han recomendado este lugar. He pedido dos platos de patatas bravas y sería capaz de cómerme un tercero” – me dice sonriendo después de enseñarme la imagen de su Instagram.

Ahora ya tienen la carta en inglés: bravas, tuna, croquettes, dumpings, russian salad, anchovies, fuet (pork) cockles, clams, olives… no vamos a pararnos a analizar las divertidas traducciones, pero sí sus deliciosas tapas.

¿Qué tienen las bravas del Tomás que no tengan en otros lugares? Parece una receta sencilla: patatas fritas en aceite de oliva, peladas y cortadas de manera irregular, crujientes, con un alioli delicioso y un picante de color rojo que es “su secreto casero”. Sabemos que iréis allí a probarlas pero, por favor, no olvidéis el bonito con pimiento, si os gusta el escabeche, las anchoas y las empanadillas que también son caseras. Son tres de sus platos más solicitados después de las famosas bravas.

¿Qué pasa si llegáis y está lleno? Os vamos a decir un secreto yurbbaners, que pocos conocen. Y es que junto al bar Tomás los mismos propietarios tienen otro bar. Ivorra 10 está a escasos metros. Con una carta basada en platos combinados y por supuesto sus bravas, donde siempre hay sitio y sólo la gente del barrio conoce. No es tan pintoresco ni bonito quizás, pero igual de auténtico, muy resolutivo si vienes de lejos y mucho más tranquilo. Está en la calle Ivorra, que es perpendicular a Mayor de Sarrià. En su carta, además de bocadillos y platos combinados, encontrarás tapas y pizzas.

Prometemos seguir desgranando lugares que para nosotros son especiales, para que disfrutéis de la Barcelona que nosotros disfrutamos. ¡Palabra #Yurbban!